Retomamos las entregas del Rincón de Mike–Vk con este sexto capítulo donde vamos a tratar el concepto de la telemática y su influencia pasada, presente y futura en esta nuestra afición. Para empezar, veamos el origen y evolución de este término.
«Telemática» es un vocablo que si bien sigue siendo válido y utilizado en muchas situaciones, no ha sabido mantenerse en el ámbito del uso masivo, ni alcanzar la popularidad de algunos otros. Por ejemplo el hipernombrado «multimedia» es un término que de una u otra forma no ha dejado nunca de utilizarse, renovando su significado desde su concepción allá por la primera mitad de los años 90. A modo de curiosidad, recuerdo una conferencia de Victor Ruiz en la Retromadrid de 2014, en la que el fundador de Dinamic dejó claro que la primera y posiblemente mejor definición de multimedia es: «todo lo que viene (o venía) en soporte CD». Así de simple.
Como no puede ser de otra manera, nos fiamos de la Wikipedia para conocer tanto la definición como el origen del vocablo. Resumiendo y concretando, podemos decir que la telemática «es la disciplina científica que trata el estudio y la investigación de las redes y servicios de comunicaciones, para el transporte, almacenamiento y procesado de cualquier tipo de información (datos, voz, vídeo, etc.), incluyendo el análisis y diseño de tecnologías y sistemas de conmutación». En definitiva, la fusión de la informática con las telecomunicaciones. A día de hoy, es tan obvio que la telemática ha absorbido nuestro mundo, ha tomado el control de nuestra sociedad, e interfiere en casi cualquier cosa que hacemos, que quizás por ello hemos dejado de utilizar esta palabra, pues no parece que sea muy necesaria.
Moviéndonos ya en el ámbito doméstico de nuestros microordenadores y videoconsolas, durante la era de los 8 bits la telemática tuvo muy poca transcendencia entre usuarios y jugadores, si bien en cuanto a las compañías desarrolladoras es muy conocido las curiosas comunicaciones de datos en transmisión serie (de bit en bit) enlazando unos flamantes y caros PC IBM con los Spectrum, Amstrad, y similares. Redes telemáticas en toda regla que dieron lugar a la multitud de videojuegos que todos disfrutamos.
Con la llegada de los 16 bits se atisban los primeros coletazos al asunto de la comunicación en red dentro de nuestros hogares, sin embargo durante los años que disfrutamos de nuestros micros ochobiteros la telemática a menudo discurría solo en nuestra imaginación. Fantasear con un joystick y un cable larguísimo de vídeo conectando la casa de tu primo con la tuya para echar un Target Renegade en remoto era un sueño bastante húmedo. ¿Tu no lo imaginabas a finales de los 80?. ¡Seguro que sí!.
Bien asentados ya los 16 bits, hoy sabemos que existían diferentes posibilidades para descargar videojuegos y otro software en algunas plataformas mediante subscripción vía cable telefónico, pero muy pocos lo experimentamos en España. Por otro lado, en máquinas como el Atari ST o el Amiga 500, las conexiones en red empezaban ya a formar parte de su funcionalidad estándar. Eso sí, bastante costoso era tener una de estas máquinas en tu habitación, como para tener varias de ellas y montarte una red local de Ataris ST con ampliación de memoria. Sueña y sigue, amigo.
Ahora bien, sin salir de la esfera de nuestro hobby y toda este universo de videojuegos clásicos y retroinformática que tanto nos apasiona, podemos preguntarnos qué importancia puede tener la telemática hoy en día en cuanto a los 8 y 16 bits, videoconsolas clásicas, microordenadores y videojuegos. La respuesta es muy obvia: toda la importancia, infinita. Desde descargarnos roms y emuladores hasta crear espacios para compartir ideas y experiencias. Podcast que todos oímos y disfrutamos, canales de youtube que han derivado en verdaderas comunidades y amistades en el mundo real. Desarrollos colectivos remotos de videjuegos para máquinas clásicas. Modificaciones y mejoras de hardware clásico, y construcción de placas nuevas como el ZX-Uno. Y lo más importante, las partidas «a dobles» en remoto a nuestros clásicos de siempre. Quien lo iba a decir, la telemática hoy lo es todo para máquinas clásicas y para nuestra afición.
Veamos ahora algún que otro punto a tener en cuenta en la historia de esta fusión de informática y telecomunicaciones:
– Años 60: Estados Unidos desarrolla y pone en funcionamiento lo que hoy conocemos como GPS. Empezaron siendo seis satélites orbitando los polos, hoy son varias decenas de ellos que ahora todos nosotros usamos, eso sí bajo licencia aquí en Europa, pues la propiedad sigue siendo norteamericana.
– 1985: primer sistema de navegación para automóviles. Se llamaba Etak, utilizaba un microprocesador 8088, 256Kb de RAM, y los mapas digitales se cargaban desde soporte externo, concretamente cintas de 3,5 Mb
– 1995: el 4 de Septiembre de este año, telefónica lanza infovía, una red que permitía el acceso a un internet todavía en pañales. Bastaba un modem de 56k y un proveedor de acceso que te cobraba un dineral. Muchos de nosotros, adolescentes de hormonas revolucionadas y adictos a todo lo que oliese a bits y chips, utilizamo alguno de los muchos CDs de acceso que ofrecía el periódico en su edición dominical. Esto causaba un doble conflicto familiar, por un lado la alta cifra en la factura telefónica del mes siguiente, y por otro convencer a nuestros padres de que esa línea 906 no era un teléfono erótico, sino que realmente la utilizaba el proveedor para enlazar tu acceso telefónico a la red.
Capítulo destacado en la historia negra de España.
Ya para despedirnos, un apunte centrado en nuestra Edad de Oro del Software Español que ya hemos citado al principio. La telemática como no podía ser de otra manera fue algo fundamental. Un ejemplo son los estudios de desarrollo de Dinamic, donde la misma compañía desarrolló una herramienta llamada «el kernel R1» que consistia en un software que aglutinaba todas las funciones básicas nivel de ROM comunes a las plataformas de micro Z80, concretamente Spectrum, Amstrad y MSX. Esto permitía conectarlas entre ellas, haciendo uso de un cable serie RS-232 proporcionado por la empresa Ingeniero MHT. Estas redes permitían compartir, transferir, y ejecutar código entre ellas, lo cual sin duda facilitaba el desarrollo aumentando la calidad final de sus productos
Llegados a este punto final, solo queda plantearse algunas preguntas. ¿Qué tiene todavía que ofrecernos la evolución de la telemática a este nuestro hobby?. ¿Volveremos a jugar a dobles al Arcade de Final Fight vía Realidad Virtual?.
¿Quizás holográficamente?. De la misma manera que ahora compartimos directos de youtube o partidas online, quizás muy pronto nos pongamos unas gafas cada uno en nuestra casa, y entrarán nuestros cuerpos digitalizados en una sala Arcade Virtual a echarnos una partidita a cuatro al Gaunlet. Si, da un poquito de miedo, pero… ¡Anda que no molaría!. Nos vemos en la próxima entrega del Rincón de Mike–Vk, como siempre aquí, en Ready And Play.