No sólo de homebrew vive el mono

Relevo Videogames es una empresa muy conocida en el territorio nacional por su faceta de juegos ‘homebrew’, en especial para los sistemas MSX con títulos como La Corona Encantada, British Bob o el reciente Relevo’s Snowboarding. Pero además de estos guiños nostálgicos hacia el ordenador de su infancia, también es un estudio que se encarga de desarrollar juegos para sistemas actuales.

Baboon! no es su último producto, pero es un juego que no le afecta el paso del tiempo. Publicado en 2015 para la portátil de Sony, tuvo un relanzamiento dos años después para la hermana mayor: PS4.

Los piratas llegan a Villa Plátano

Como en otros juegos, la vida en Villa Plátano era tranquila y feliz. Sus habitantes hacían su día a día en armonía y sin tener más complicaciones que encontrar una buena palmera donde dormir y ver pasar el día.

Pero la llegada de Baboon y sus secuaces interrumpió toda esta paz, y no sólo en Villa Plátano. Toda la isla ha sufrido los ataques de los piratas, se han aliado con malignas abejas, vampiros y otras criaturas para someter cada poblado. Baboon está decidido a lograr el artefacto que necesita para ser el más temido de todos.

Tumbili entra en acción

En las primeras fases tendremos una guía de vuelo para visualizar de antemano cómo será nuestro vuelo

Aquí es donde entramos nosotros, Tumbili, un simpático monito capaz de usar el impulso de las bombas para avanzar fase a fase y enfrentarse al jefe final que atemoriza cada uno de los poblados. La mecánica del juego nos hará recordar los cálculos matemáticos de las parábolas. Debemos alcanzar la cima superior de cada fase, para ello podremos plantar una bomba en el suelo e impulsarnos con su explosión, podremos decidir tanto la dirección como la potencia de la misma. Inicialmente tendremos una guía de vuelo para ayudarnos a calcular el vuelo de nuestro simio favorito, pero pasadas unas fases ya tendremos que hacer el cálculo sin ayuda.

A lo largo de 7 ‘mundos’ tendremos que ir completando sus 6 fases principales. Al final nos aguardará un jefe final para poder progresar al siguiente mundo. La estrategia para vencer a este ‘boss’ irá cambiando cada vez, por lo que tendremos que estudiarlo para ver dónde reside su punto débil.

Uno de las grandes ventajas del juego es su dificultad a medida. Nosotros seremos los que decidiremos cómo de difícil queremos que sea nuestra experiencia. Para continuar la historia sólo es necesario completar el nivel (incluso se puede usar la guía de vuelo); pero si somos completistas, intentaremos conseguir todas las medallas posibles. Cada fase nos puede otorgar hasta 3 preseas; la primera será por completarlo, la segunda por coger todos los plátanos, y la tercera por completar un desafío (que será revelado tras conseguir la primera medalla). Estas dos últimas medallas aumentarán la dificultad del juego e incluso, en ocasiones no serán posibles conseguirlas hasta que avancemos en la historia y consigamos ciertos objetos. No hay excusa de edad o habilidad para probar este juego.

El mono explorador

Al finalizar cada mundo, nos la veremos con un jefe final. Habrá que idear una estrategia para cada uno

La base del juego será nuestra habilidad con las bombas para ir completando las fases, pero como aspecto secundario tendremos una especie de videoaventura tipo ‘cadena de favores’. En nuestra aventura iremos conociendo varios personajes que nos suministrarán información muy útil. Así podremos ir ayudando a unos y a otros para ir desbloqueando nuevos tipos de bombas, u otros objetos que se descubrirán más adelante. Toda esta exploración afectará positivamente a nuestro rendimiento; veremos que algunas medallas que se nos resistían, ahora serán mucho más fáciles de conseguir.

Otra de las ayudas que encontraremos serán las tiendas, ahí podremos hacer uso de los plátanos recogidos para comprar útiles que nos van a venir muy bien para combatir ciertos enemigos. Habrá que descubrir qué elemento es la debilidad de los enemigos de cada mundo.

… Y más sorpresas

Ayuda a los habitantes y serás recompensados con nuevos objetos que te harán la aventura más fácil

A pesar de todo lo comentado, aún quedan muchas cosas por descubrir. El juego no cae en ningún momento en la ‘mono’-tonía. Aunque no cambia significativamente su objetivo, vamos descubriendo novedades a nuestro paso. Escondido en cada mundo aparecerá una fase extra, completando todas ellas nos dará acceso a todo un mundo adicional al acabar la historia. Y vas a querer jugar ese mundo escondido, pues es todo un homenaje a videojuegos clásicos e incluso podremos cambiar nuestras bombas por una nave mata marcianos.