¡Nos atacan los alienigenas!

El malvado imperio Barrax ha secuestrado a los comandantes Berry D. Mayers y Lori Bergin cuando volvían de una importante misión. Su base ha sido localizada en el planeta hueco Terrainia. Nuestra misión, destruir su base y rescatar a nuestros compañeros; para ello contamos con una poderosa nave equipada con la famosa bomba Nova.

M. Pedersen y T. Larsen son los principales autores de este clásico de Amiga, presentado como una secuela de su primer juego (Hybris) nos brindan un juego completo que podría acaparar las monedas de una sala recreativa. Con múltiples técnicas avanzadas (casi propias de la demoscene) consiguen exprimir la máquina para ofrecer un título que nada tendría que envidiar a los shoot’em up de los arcades.

Armamento

Antes de bajar a los niveles inferiores hay que subir nuestra arma al máximo y hacernos con una reserva de bombas

Es un ‘shmup’ de corte vertical, pero con cierto scroll horizontal cuando nos acerquemos a los bordes, que nos vendrá bien para encontrar un hueco donde escapar ante la avalancha de balas enemigas. Dispondremos de un disparo básico de inicio. Conforme eliminemos cierto tipo de enemigos, podremos tanto mejorarlo como cambiarlo. Tenemos cuatro tipos de disparos a elegir, con sus ventajas e inconvenientes, siendo su diferencia la potencia de daño y el rango de amplitud que abarca. Siendo posible mejorarlo hasta 5 veces.

Para rematar nuestro arsenal, la bomba Nova limpiará la pantalla de balas y dañará a los enemigos cercanos; el inconveniente es la manera de lanzarla. Tendremos que apretar disparo y dar una vuelta al mando para activarla. Por suerte, la versión hdf permite que pueda ser accionada usando el segundo botón.

Terrainia

«Enter Here» Una invitación para acceder a los 3 niveles inferiores y hacer salir al final boss

El planeta se compone de dos niveles. En la superficie, donde comenzamos, nos encontraremos con enemigos lentos y no muy resistentes. Como nos aconseja el propio manual del juego, es conveniente quedarnos en la superficie hasta que hayamos maximizado nuestra arma y nos hayamos hecho con un buen suministro de bombas.

Una vez que estemos preparados podremos entrar al subsuelo. A lo largo de la superficie habremos detectado hasta tres hoyos que nos invitaban a explorarlos con el ‘Enter Here’. Éste es el verdadero objetivo del juego; tendremos que entrar en los tres agujeros y sobrevivir a los variopintos enemigos del imperio Barrax, mucho más numerosos y resistentes que los de la superficie.

Al recibir un impacto, aparte de perder una vida, perdemos las bombas que habíamos almacenado para volver a tener las 3 iniciales y el mayor inconveniente: nuestra arma principal retrocede unos cuantos pasos en su eficiencia. Si tenemos la suerte de encontrar pronto algún power-up o volver a la superficie, todavía podríamos remontar la partida; sino, más vale volver a empezar.

2 mejor que 1

Los niveles inferiores son bastante más difíciles y nos encontraremos con algunas naves duras de vencer

Si ya nos sorprende ver el juego con scroll vertical (forzado) y horizontal (a demanda), con multitud de enemigos y balas; acabaremos por aceptar que se etiquete el juego como ‘perfección técnica’ cuando descubrimos la posibilidad de jugar a dos jugadores (jugador 1: nave plateada; jugador 2: nave dorada), que además repercutirá en más enemigos en pantalla para elevar proporcionalmente la dificultad del juego.

Si todo lo comentado anteriormente es suficiente para describir un buen juego, todavía cuenta con algunos añadidos más para mejorarlo. Dispondremos de vidas extra por puntuación, algunas naves serán difíciles de detectar al sólo ser visible un efecto (muy logrado) disruptivo del suelo; e incluso podremos configurar nuestra partida a nuestro gusto, entrando al menú de opciones (barra espaciadora en menú inicial) para ajustar el número de vidas, velocidad de las balas, …

El juego recibió una versión para Mega Drive (con los arreglos musicales de Rob Hubbard) y actualmente hay versiones para dispositivos móviles iOS y Android.