DEFCON 1

La guerra fría fue un tema mundial en los 80s y tuvo su repercusión en la cultura en canciones como Hammer to Fall (Queen), Russians (Sting) o películas como Juegos de Guerra (MGM). La creciente tensión política entre Estados Unidos y la Unión Soviética tuvo incidencia también en los videojuegos, con este «Raid Over Moscow». En este caso eramos parte del bando norteamericano y debíamos primero neutralizar los misiles soviéticos para hacer posteriormente una incursión en la mismísima capital rusa para terminar con este conflicto por la vía rápida.

El juego original de Bruce Carver se considera uno de los clásicos y muy recordado aquí sobre todo por estar incluido en el pack Super 10. Muchos años después, el grupo ReImagine Games ha realizado una conversión para Commodore Amiga, aprovechando las capacidades gráficas del ordenador de 16 bits sin perder ni un ápice de diversión.

Las negociaciones han fracasado y el ataque soviético es inminente, por suerte contamos con la US Estación espacial con un número de cazas de última generación para neutralizarlos. Nada más cargarse el juego podremos elegir entre 3 niveles de dificultad y 2 modos de control: El clásico y uno modificado, más adaptado a la actualidad.

3, 2, 1, … Despegue

La primera fase es uno de esos casos (algo frecuente) de los juegos de los ochenta, donde quizás no se hacía mucho trabajo de feedback para ajustar la dificultad de los primeros pasos en un juego. Esta curva de dificultad inicial podía hacer que muchos jugadores se rindiesen en los inicios de un juego y luego no descubriesen todas las maravillas que venían detrás. La falta de la figura del tester (probador) distinto al programador o las prisas por publicar un juego hacía que algunos títulos hayan quedado con ese sabor agridulce de ser buenos juegos pero con una jugabilidad inicial ‘poco amigable’.

Algunos aún sufren pesadillas al recordar este hangar

La primera fase de Raid Over MoscoW es la más icónica del juego, precisamente por esta característica. A la simple tarea de sacar nuestros aviones de la estación se complica por un control algo complicado donde manejamos la dirección, altura, velocidad y apertura de puertas con nuestro joystick (apenas 5 ‘inputs’). El éxito de la misión dependerá que entrenemos bien esta maniobra y seamos capaces de sacar los aviones al exterior con destreza. Cuantos más aviones seamos capaces de sacar, más posibilidades tendremos en fases siguientes.

Con Izquierda y Derecha gestionaremos la rotación de nuestra nave; indispensable al inicio al no encontrarse nuestro avión alineado con la puerta de salida. Con el botón de Disparo subiremos de altura; pero una vez lo hayamos accionado tendremos que tener cuidado de que no vuelva al suelo por efecto de la gravedad. Sin una altura adecuada no se abrirán las puertas del hangar. Las puertas se abren accionando la dirección de Abajo, pero tardarán un tiempo y sólo permanecerán abiertas un rato. Finalmente, con la dirección de Arriba aumentaremos la velocidad de nuestro caza. Nos podrá servir de freno si hacemos un giro de 180º.

Incursión a las ciudades soviéticas

Uno de los momentos más complicados. Volar bajo para dejar pasar el misil y luego subir para evitar la barrera terrestre

Una vez hayamos sacado mínimo un avión de la estación espacial podremos optar por sacar otro más (pulsando disparo) o moverlo a la ciudad responsable del lanzamiento de los misiles nucleares enemigos. En cuanto dirijamos nuestros cazas a la ciudad se mostrará la segunda fase, donde manejaremos la posición y altura del avión.

Se nos aconseja volar bajo para evitar el misil teledirigido, pero habrá que subir para evitar las barreras terrestres. Si morimos en esta fase, podremos continuar en la misma si hemos sacado algún avión más. En caso contrario volvemos a la estación espacial.

Una vez hayamos llegado a la ciudad, estaremos frente a 5 edificios. El central será nuestro objetivo, pues destruyéndolo neutralizaremos la amenaza de los misiles nucleares. Para conseguir este objetivo tendremos 6 horas (no reales) que se va mostrando en el marcador (TIME TO IMPACT) y va decreciendo desde que comenzamos a jugar. Para destruir el edificio hay que disparar a su pequeña ventana. Alinearnos en frente suya es fácil, lo complicado será acertar con la altura; por suerte, nuestro avión se tornará azul cuando demos con la altura correcta.

De igual manera se puede proceder con los cuatro edificios restantes si disponemos de tiempo suficiente, que nos otorgarán puntos y vidas extra; pero no son obligatorios. Una vez derrotado el edificio central, volveremos a la estación espacial porque una nueva ciudad soviética lanzará una nueva amenaza nuclear. Una vez destruida una tercera ciudad, iremos directo a Moscú.

Objetivo: Moscú

Los juegos con diferentes mecánicas eran bien acptados entonces

Nos encontramos frente a un edificio de arquitectura característica rusa armados con un lanzacohetes y rodeados de enemigos. Nuestro objetivo aquí será primero encontrar la puerta correcta para acceder a la siguiente fase y «limpiar la pantalla» de rivales. Nos podremos desplazar en nuestra trinchera para evitar los disparos y ajustar la altura de nuestro disparo. Una vez encontrada la puerta blanca y sin enemigos que molesten, entraremos al reactor en busca de la misión final.

En esta habitación vemos como un robot programado va puntualmente refrescando las distintas celdas del reactor para evitar una fusión nuclear. Aquí sólo estaremos equipados con un disco al más puro estilo Tron, que podremos lanzar para desactivar al robot. Sin embargo, éste será vulnerable sólo por su espalda por lo que habrá que rebotar nuestro disco contra la pared del fondo para impactarle el suficiente número de veces para destruirlo y acabar con todos los robots de mantenimiento. Con el último tendremos el inconveniente añadido que aparecerá una cuenta atrás para salvar a nuestros pilotos supervivientes.

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