Los Amores de Brunilda (MSX2)

Fantástica conversión de BitVision de esta estupenda video-aventura lanzada en 2013 para ZX Spectrum por RetroWorks

carátula del juego«Fray Gonzalo y Fray Cesáreo, ambos franciscanos, llegan a San Arteixo do Montalvo en busca de alojamiento tras una dura jornada en su peregrinación a Santiago.» Así comienza nuestra aventura, algo tan simple como pasar la noche deriva en una serie de sucesos en los que conoceremos más a fondo la vida de este poblado y en especial, los amores de Brunilda. De carácter videoaventura, iremos explorando el pueblo y alrededores para hacernos con objetos vitales que establecerán una «cadena de favores»; progresaremos y ahondaremos en la historia. Nada más empezar tenemos la posibilidad de escoger idioma entre varias de las opciones: castellano, catalán, inglés, … e incluso en la jerga de Nelo & Quco.

Curiosa ha sido la historia de este fabuloso juego, cuyo germen nació por allá en 1994 y su idea inicial era implementarse en una aventura conversacional. La conversión a MSX2 termina de completar un juego que ya cosechó buenas críticas en su versión ZX, con un apartado gráfico excelente que sorprende desde sus inicios con una espectacular imagen del juego en alta resolución (512×424 pixels). Además vuelve a estar acompañada de una cuidada edición física donde incluso podremos guardar el progreso de nuestra partida.

<Alerta Spoiler>

Antes de continuar leyendo este artículo recomendamos encarecidamente jugar al juego por vuestros propios medios, pues se va a comentar a fondo relatando momentos del argumento que siempre es mejor descubrirlos por uno mismo.

Capítulo 1: La llegada.

Nada más llegar a San Arteixo do Montalvo buscamos alojamiento en la posada, pero no hay habitaciones disponibles. Nos dirigimos a la iglesia donde don Cirilo nos acompaña hasta la casa del boticario don Justiniano, que nos acoge amablemente y nos ofrece una copiosa cena. Al despertar nuestro compañero Fray Cesáreo amanece inconsciente, no hay manera de que vuelva en sí.

Capítulo 2: La Meiga.

comienzo del capítulo 2

Nuestro compañero no despierta

A regañadientes buscamos ayuda en la meiga que vive ne las profundidades del bosque, pero ya nos advierte la gente del pueblo que mientras que no abramos nuestra mente a sucesos más allá de nuestra fe, no podremos encontrarla. Aquí nos damos cuenta de un aspecto del juego, nuestra barra de energía. Situada abajo a la izquierda tenemos un indicador que se mueve desde la más absoluta fe en nuestra religión hasta la pérdida de la misma y creencia en las supersticiones populares (representado por el símbolo celta). En momentos generales, la pérdida de nuestra fe supondrá el fin de nuestra aventura y que tengamos que empezar de nuevo. Para evitar esto tenemos varias opciones: Entrar en la iglesia o ermita para renovar nuestra fe, encontrar rosarios o hacer uso de las contraseñas que se nos muestras al principio de cada capítulo para que podamos retomar nuestra partida desde ese punto.

En este momento de la historia es necesario perder un poco de nuestra fe (al menos hasta la zona amarilla) para que se abra el paso al bosque. En la parte más profunda del mismo se encontrará la meiga que nos ayudará, pero no nos saldrá gratis. Tras analizar a nuestro compañero concluirá que el mal que padece es por culpa de Brunilda.

Capítulo 3. La aparición.

Brunilda y el cementerio

Brunilda no cuenta su triste historia y por qué no puede su alma descansar en pa

Aquí conocemos la historia de Brunilda, una doncella que vivía en la casa del boticario don Justiniano y que estaba enamorada (de manera correspondida) del hijo del mismo, Antón. Sin embargo, éste murió en extrañas circunstancias; Brunilda no pudo soportar esa pérdida y se suicidó para reencontrarse con él en el más allá.

Con el acompañamiento de la oscuridad de la noche vamos al cementerio para dar descanso a Brunilda, pero sus restos son robados. Para que pueda descansar en paz ahora tendremos que recuperar sus restos.

Capítulo 4. Por fin juntos.

Éste es el capítulo central del juego, el más exigente y largo. Los restos de Brunilda se encuentran repartidos en cuatro cavernas localizadas en el bosque. Pero para entrar en ellas precisamos de activar los monolitos con el agua de las siete pozas. Estas pozas se encuentran en lo alto del monte y para conseguir algunas precisaremos de un farol, pues tendremos que entrar en oscuras cavernas.

Danza macabra

Al final de la caverna nos espera un guardían y un nuevo modo de juego

Una vez hayamos abierto la puerta para las cavernas, es recomendable ir con nuestra fe intacta, al máximo. Encontraremos multitud de enemigos habitando en ellas que bajaran nuestra fe hasta que perdamos la vida. El poco alcance de nuestro sistema de alumbrado hace que explorar estos laberintos sea muy complicado y que nos perdamos con facilidad. Por suerte, los propios laberintos en su suelo van indicando pistas de hacia donde debemos dirigirnos. Una vez que lleguemos al centro de la caverna, un guardián nos desafiará a una danza macabra. Un «Quick Time Event» que tendremos que accionar en el momento preciso para derrotar y obtener una de las 4 reliquias robadas. Para la quinta todo parece indicar que la guarda el propio boticario, pero la verdad nos será revelada más tarde cuando intentemos dar sepultura y descanso.

Capítulo 5. La revelación

Descubrimos que alguien se interpuso en el romance de Antón y Brunilda, y para que ellos tengan un descanso definitivo debemos convencer a don Justiniano de la pureza e integridad del amor entre su hijo y la doncella. Para ello buscaremos el diario de ella y las cartas que se enviaban los enamorados, que se encuentran escondidas en una parte de la biblioteca de la casa. Tras una intensa exploración y seguir con la cadena de eventos entre los distintos personajes y localizaciones del mapa, llegaremos al enfrentamiento final y podremos regocijarnos con el final feliz de los enamorados. Tras celebrar con otra copiosa cena nuestro triunfo despertamos junto a Fray Cesáreo que no parece recordar nada de lo sucedido ¿o nos lo hemos imaginado nosotros?

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